'Berserk' de Kentaro Miura

Autor: Kentaro Miura
Escuela: Cómic Manga
Encuéntralo en: C-MAN MIU ber
Recomendado por la Biblioteca Mario Vargas Llosa
"Largo es el camino y duro, que de los Infiernos guía hacia la Luz."
John Milton, Paraíso perdido
¿Alguna vez has sentido que vives en un círculo vicioso de constante frustración? Kentaro Miura (1966-2021), autor de Berserk, reconoció hace tiempo que los temas principales de la obra versaban principalmente sobre la furia y la rabia. La idea de amor fati, o amor al destino, no se materializan tanto aquí, afrontando las alegrías como las penas de la vida de forma unilateral. Sino que abraza resignadamente una existencia de pesar, agotamiento y estoicismo sin más satisfacción que el frenesí de la cacería. Pese a todo, como pequeños haces de luz, los escasos momentos de empatía o compañerismo, refulgen más que nunca en esta historia de fantasía oscura.
En un mundo que se derrumba, asolado por monstruos y demonios, Guts emprende una cruzada sin tregua contra los Apóstoles, un grupo de demonios con poderes inhumanos. Guts es un caballero dominado por la ira, que no duda en emplear cualquier medio, por cruel que sea, para alcanzar sus fines. Durante su periplo de muerte y destrucción, conocerá al idílico elfo de nombre Puck, que dará esperanza a sus violentos cambios de humor, y le recordará que hay cosas más allá del dolor y la soledad.
Berserk es una lectura sencilla, pero poseedora de un amplio bagaje cultural, como así quiso su autor desde un comienzo. Está lleno de referencias a la religión, la filosofía, la literatura o la mitología. No es casualidad que acabara convirtiéndose en la principal inspiración del creador de videojuegos Hidetaka Miyazaki, autor de la saga Dark Souls, Elden Ring y Bloodborne.
La obra posee un estilo fiel al tipo de manga enfocado a chicos, los seinen (aunque obviamente tenga una legión de seguidores femeninos). El dibujo es trepidante, a veces parece un grabado antiguo, y presta especial detalle al entorno y a la anatomía de los cuerpos, a veces de forma muy exagerada.
Berserk se presta mucho a lo frenético, en donde la violencia cumple un papel fundamental. Pero es en el contraste con lo humano, a partir del deseo de redención y de ser salvado lo que otorga al manga un halo de dignidad y compasión, en una auténtica batalla campal entre el Mal y lo menos malo.