'La flor más grande del mundo ' de José Saramago
Autor: José Saramago
Encuéntralo en: AVE SAR
De 9 a 11 años
Recomendado por la Biblioteca José Saramago
Hoy os invitamos a descubrir uno de los pocos cuentos escritos por José Saramago para el público infantil. Es una buena forma de acercarse a su obra y a su personal forma de escribir. Desde las primeras líneas, el premio Nobel nos advierte de que él, es un escritor para adultos y admite su limitación para dirigirse a los niños.
Cuenta la historia de un niño, al que él mismo llama ‘héroe’, a quien la curiosidad por explorar nuevos caminos y un pequeño acto solidario, creer en sí mismo también, le lleva a salvar una flor. Una flor pequeña y casi muerta, pero que en este cuento es símbolo de muchas cosas. El protagonista convierte la flor pequeña y seca en ‘la más grande del mundo’, y esta cuida de él después, cuando lo necesita.
No es casualidad, que sea un niño quien salve a la flor, porque es esa solidaridad precisamente la que se va perdiendo a medida que nos vamos haciendo mayores. También, se pierde la fe en que todos los actos, por pequeños que sean, ayudan a mejorar el mundo.
Otra cuestión importante, y muy distinta, entre el mundo infantil y el adulto es el significado del tiempo. El cuento nos enseña, que no se pierde el tiempo por observar los pequeños detalles o por dedicar nuestros pensamientos a ellos. Además, el viaje que emprende el niño puede interpretarse, como un viaje interno en donde éste, busca en su interior, aquello que le ayudará a crecer y a darle un sentido a su vida, y su infancia será siempre aquel lugar para reencontrarse con lo mejor de sí mismo.
El cuento tiene múltiples capas de lectura, desde la frase de la contraportada, a la reflexión que aporta al eterno debate sobre la literatura infantil, es una historia premeditadamente sencilla, pero llena de metáforas y simbolismos. Le habla al lector, se disculpa y luego le interroga y también le anima a escribir. Reflexiona sobre la literatura y la creación literaria, planteando que es el mismo lector, quien puede convertirse en autor al reescribir la historia que imagina Saramago. Una historia que no os dejará indiferentes, tengáis la edad que tengáis, os invitará a reflexionar, a haceros preguntas diferentes cada vez que la leáis.