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ENTRADAS YA A LA VENTA

Juana I de Castilla (1479-1555) fue encarcelada en un palacio de Tordesillas tras la muerte de su esposo Felipe el Hermoso, con el apoyo de sus padres, los Reyes Católicos, y más tarde de su hijo, Carlos V.
Considerada demente, la legítima Reina de España permaneció encerrada durante 46 años, alejada del poder. La visión romántica manifestada en famosos cuadros como Doña Juana La Loca (1877), de Francisco Pradilla, contribuyó a asentar en el imaginario colectivo la idea de la supuesta locura de Juana I de Castilla. Aún muy discutida, la razón de su reclusión puede interpretarse como una estrategia política para mantenerla alejada de cualquier poder. Como afirmaba Michel Foucault en su Histoire de la folie (1961, ed. Plon), la locura es una construcción social, cuya razón de ser reside en su oposición al orden establecido.

En 1992, coincidiendo con la conmemoración del quinto centenario de la llegada de Colón al Nuevo Mundo y la celebración de esta historia predominantemente masculina y colonial, La Ribot creó El Triste Que Nunca Os Vido, un dúo para mujer y hombre inspirado en la vida de Juana I de Castilla, que interpretó junto al actor Juan Loriente. En esta obra coreográfica, el Estado vigilante aparece encarnado en un hombre que acosa y persigue sistemáticamente a la reina, dejándola atrapada en la sombra de su delirio, condenándola a una soledad permanente.

Si en El Triste Que Nunca Os Vido, la coreografía evocaba la opresión sufrida por la reina, en Juana nocturno, la puesta en escena esta dedicada al tiempo, un tiempo que, como el de Juana, se ha convertido en un resonar repetitivo que la excluye y expulsa del transcurrir de la historia. Por eso, Juana nocturno tiene una naturaleza claramente sonora: la música y la imagen se confunden en un juego sinestésico en el que se difuminan los límites entre la escucha y la mirada. En esta nueva obra, la opresión deja de ser un tema narrativo, para convertirse en una experiencia temporal y esencialmente sonora. El dúo formado por Juan Loriente y La Ribot en 1992 cambia a través de las épocas. Para vivir el paso del tiempo en cautiverio, dos jóvenes intérpretes se unen al dúo histórico. Les acompañan siete solistas de OCAZEnigma y un coro polifónico local para cada lugar de actuación. Basado en el cancionero, la colección de canciones regaladas a Juana I de Castilla y Felipe el Hermoso en su boda, Iñaki Estrada compuso la música original. El ensemble de solistas de la Orquesta de Cámara del Auditorio de Zaragoza, una de las formaciones españolas más reconocidas en el campo de la música del siglo XX y contemporánea, bajo la dirección de Asier Puga, se inspira en las obras de Juan del Encina, Antonio de Cabezón y Cristóbal de Morales, entre otros. Repertorio compuesto en el tiempo y contexto de Juana I de Castilla que será presentado bajo el filtro de las técnicas contemporáneas o las realidades electrónicas.

Pensado para espacios interiores o exteriores que permitan la entrada de luz natural y la transición a la oscuridad, el montaje escénico se organiza en círculos concéntricos. En el centro se sitúa la orquesta, alrededor de la cual gravitan el público y los bailarines, rodeados a su vez por el coro, todos en constante movimiento.