Ganadoras del XV Premio de Microrrelatos: 'Microhistorias en el ascensor'
Ya conocemos el fallo del jurado de nuestro XV Premio de Microrrelatos.
En esta edición, la temática de nuestro veterano certamen giró en torno el lema 'Microhistorias en el ascensor'.
Subir y bajar en ascensor es algo que nos resulta familiar en nuestro día a día. Un lugar que propicia a la conversación y que seguro que ha inspirado a las personas participantes para contarnos en sus relatos historias de lo más cotidianas y no tanto.
El objetivo principal de esta convocatoria es impulsar la creatividad de los autores y autoras centrándose en este género literario, el microrrelato, que cada vez cobra más auge en el mundo literario.
Queremos dar las gracias a todas las personas que han participado y nuestra más sincera enhorabuena a las personas premiadas.
La entrega de premios se realizará, de manera presencial, en una de nuestras bibliotecas. En los próximos días, haremos públicas la fecha, hora y lugar del acto.
Estos son los relatos ganadores:
Primer premio:
El poder del botón rojo
Autora: Carolina Cosme Ruiz
Se mudó al ascensor cuando la echaron del piso a primeros de mes; dijo que como había pagado la comunidad, le correspondía el uso. Es propio encontrarse a la señora en bata, con un termo en la mano, preguntándote a qué piso vas. Nos tiene prohibido tocar el cuadro de mandos, y es casi delito entrar sin limpiarnos antes las suelas. Una silla de esparto le hace de cama, mesa, sillón de TV y armario.
El día que no respondía ni ella ni el ascensor, temimos lo peor.
—¿Gregoria, está bien? —preguntó un bombero.
—Perfectamente. Usen la escalera, necesito intimidad.
Segundo premio:
Ascención Arribas
Autora: Carla Martín Mosquera
Hay decisiones que te cambian la vida. Como decidir subir las escaleras o coger el ascensor. Ascensión Arribas lo sabe bien. Su decisión la catapultó a lo más alto, a ese lugar que ocupan las grandes estrellas, las más brillantes.
Ascensión decidió subir en ascensor ese martes de agosto. Hacía calor, llegaba cargada con la compra. Dijeron que se debió a una subida de tensión en la línea eléctrica. El ascensor se propulsó con tal potencia que salió disparada rompiendo el techo del ático. Todavía, en noches despejadas, se la puede ver orbitando la tierra aferrada a sus bolsas.
Tercer premio:
Nuevo en el edificio
Autor: Lucía Blasco del Álamo
La primera vez que la vi en el ascensor me guiñó el ojo, descarada. La segunda, me ignoró. La tercera me sonrió coqueta. La cuarta no alzó la mirada de su llavero. La quinta me tocó el brazo al hablar sobre el tiempo. Esa idas y venidas en sus deseos me provocaban aún más. No miento si digo que nos besamos entre el noveno y el décimo piso en nuestro sexto encuentro. Ni que al séptimo me giró la cara al intentarlo de nuevo. Yo era nuevo en el edificio. Las gemelas Velasco, las más veteranas.