1. Aguja, papel y tijera
En esta vitrina aparecen reunidos los materiales utilizados para el montaje y representación de la obra La viuda indiferente y esquileo de Castilla que se estrenó en el teatro del Príncipe el 2 de julio de 1781. Se trata de un apunte, la partitura y el guión de música.
Cada uno de los actos se copiaba en cuadernillos independientes, aunque no es infrecuente encontrarlos cosidos en uno solo. Del trabajo de copia se hacía cargo el apuntador y también existían copistas profesionales a los que se pagaba por el "traslado" de los textos.
De cada título existían varias copias -habitualmente tres- marcadas con números ordinales: 1º, 2º, 3º... Este ejemplar se corresponde con el "Apunte 2º". Cada copia desempeñaba una función durante la preparación y escenificación de la obra. El primer apunte se utilizaba para dirigir el ensayo.
En el segundo, destinado al tramoyista, se registraban precisiones de carácter técnico relacionadas con el montaje escénico tales como entrada y salida de personajes, nombre de los actores, vestuario, melodías, lugar de la acción...
El tercero se remitía a los censores eclesiástico y literario para obtener la licencia de representación bajo la fórmula "Represéntese", "Hágase" o "Executese".
Cierran este conjunto la partitura musical que acompañó a este montaje, compuesta en 1781 por Pablo Esteve, y el guión de música con el que se apuntaban las partes donde se intercalaban canciones como coplas o seguidillas. Además, la comedia se adornaba en los entreactos con otras piezas de carácter festivo tales como bailes, fin de fiesta, sainetes y, sobre todo, la tonadilla que, con sus retratos paródicos de la sociedad madrileña, causaba furor entre el público.