Propuesta Biblioteca Cervantina
En 1929 Víctor Espinós, director de las Bibliotecas Circulantes y de los Parques de Madrid, realiza una propuesta al consistorio solicitando la creación de una Biblioteca Circulante en la plaza de España, ante la próxima inauguración del monumento a Cervantes en la plaza indicada.
Siguiendo el modelo de las instaladas en el Parque del Retiro y del Oeste consistiría en un templete de ladrillo con anaqueles donde se colocarían las obras de Cervantes para su préstamo a los viandantes.